Y ahi estabamos, los dos, en su casa, haciendo la tarea. Sabía que en su macabra cabezita habia planeado algo mas divertido que la tarea pero nada mas no se lo ocurria como empezar, solo me veia ocacionalmente mientras calculaba la aceleracion del coche de mis sueños. De repente se estiro con una mueca de dolor. No le di importancia a su mueca y pense que hiva a pasar su braso a mi alrededor para abrazarme. Ese fue mi primer error. Ni siquiera se habia acabado de estirarse cuando se encojio en si mismo y hizo muecas de dolor, dolor inhumano. Con la mayor calma que pude le pregunte: -¿estas bien?- Mi tranquilidad se desmorono, mi voz sono rota y llena de panico. No podia hacer nada mas que verlo, el miedo de que algo malo le estuviera pasando a mi mejor amigo me consumia completamente. En un segundo estaba tirado de espaldas al suelo clavando sus dedos en la alfombra como si algo lo consumiera, lo unico que se me ocurrio fue ponerme sobre el (despues de todo alguien de mi tamaño encima de alguien se su tamaño no le haria daño) le sostuve la cara y le grite -!!Ferran!! ¡¡¡escuchame!!! ¡¡mirame!!! ¡¡¡quedate conmigo!!! ¡¡¡mirame!!! ¡¡¡quedate conmigo!!! ¡¡¡Ferran!!!- por su mirada sabia que trataba de quedarse conmigo pero aquella cosa que se apoderaba de el estaba ganando. De un momento a otro sali volando contra a pared, donde golpee tan fuerte que quede inconsiente. Lo único que recuerdo despues de eso es que lo escuchaba gritar, escuchaba a mi mejor amigo gritando de dolor y de pensar que habia matado a su mejor amiga.
Desperte con un dolor de cabeza impresionante, la vista borrosa, con la espalda completamente raspada, y mi blusa y pantalones llenos de sangre.
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